El cambio climático es uno de los temas que más preocupa en las Administraciones de todo el mundo, ya sea para reconocer su existencia, y las consecuencias que conlleva o en algunos pocos casos incluso para negarlo. En el sector agrícola hay menos dudas y en particular, el del vino ha comenzado a notarlo muy seriamente.
Cuando se habla de cambio climático todo parece muy lejano. Escuchamos las posibles consecuencias, pero no acabamos de creer que nos pueda suceder a nosotros. El sector agrario vive otra realidad. Desde hace un tiempo la subida de temperaturas ha traído cosas buenas, malas y sobre todo un futuro muy incierto. Y es que el sector del vino es uno de los que sufre con mayor agudeza, debido a la sensibilidad del cultivo.
Según la NASA los diez años más calurosos registrados hasta ahora fueron a partir del 2000. El cambio climático es la nueva realidad y lo más grave es que la sociedad no es consciente de ello. Antes de 1980, basicamente necesitabas una sequía para que se diera el calor suficiente para generar una cosecha temprana. Desde 1980 hace tanto calor que tienes veranos calurosos y cosechas tempranas sin sequía. Esto puede traer consecuencias positivas y negativas que analizaremos en los próximos post.
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