De 1, 4, u 8 meses…si estás embarazada el vino tendrá que esperar.
No tenemos que convencerte de esto, pero no está de más recordarlo: tu hijo siempre es lo primero. Si nace, crece, y aprende a disfrutar de la vida, un buen día estaréis brindando juntos celebrando una y mil cosas.
¡El volante y el vino son incompatibles!
Un buen complemento para una sesión vinícola es maridarla con una buena comida y un agradable paseo para volver a casa. Es un buen ejercicio y tu coche descansará. Por las posibles consecuencias, ambos lo agradeceréis.
Medicamentos y vino no maridan en absoluto.
Si estás tomando alguna medicación, lo mejor es centrarse en el tratamiento médico. Es mejor no arriesgarse, ¡lo importante es tu salud! Piensa que, en unos días, estarás sano para volver a disfrutar de tu vino preferido.
Add Comment